Nueva alerta sobre el colapso letal de la capa de ozono

Es cierto que a través del mapa del tiempo se nos ha informado esta semana de la alta radiación travioleta; sin embargo nos ocultan que además está llegando a la superficie terrestre la radiación UVC que afecta al ADN/ARN de todas las especies sin que haya valores de referencia en cuanto al peligro de exposición.

Una de las razones es porque el «consenso científico» prevalece por encima de las evidencias científicas. Dicho consenso dice que esas radiaciones no llegan a la tierra al ser filtradas por la capa de ozono, en contra de toda evidencia.

De nuevo la negación de hechos constatables por parte de nuestros científicos y gobiernos. La prostitución de la ciencia es tan inadmisible como alarmante porque supone volver al oscurantismo de los dogmas oficiales contrarios a una ciencia al servicio de la humanidad. 

Geoengineería: nueva alerta
sobre el colapso letal de la
capa de ozono. – Informe de
un ex ingeniero de la NASA

Dane Wigington

GeoengineeringWatch.org Traducido por www.guardacielos.org
Los programas de ingeniería climática global continúan destruyendo los ecosistemas
del planeta. Un ex empleado de la NASA, ingeniero aeronáutico aeroespacial que ha estado
trabajando directamente con Geoengineering Watch, publicó en el pasado un informe revelador
sobre el colapso de la capa de ozono. Desde entonces ha seguido monitorizando la radiación
ultravioleta con equipos de medición de última generación aportados por
GeoengineeringWatch.org. Quienes tienen los ojos abiertos se dan cuenta de la creciente
intensidad del sol. Este cambio no se debe a la actividad solar, es en realidad un síntoma de la
rápida desintegración de la capa de ozono. Geoengineering Watch ha emitido alertas
anteriores sobre el rápido aumento de la radiación UV. Pero a pesar de que hay muchos
factores antropogénicos negativos que impactan la vida que depende de la capa de ozono, los
programas de geoingeniería en curso son, con mucho, los más dañinos. Numerosos medios de
comunicación y fuentes “oficiales” defienden la falsedad de que el ozono del hemisferio sur “se
está recuperando” (para pacificar a las poblaciones), sin embargo, los datos de última hora no
apoyan el relato de la “recuperación del ozono» . Desde principios de siglo se han registrado
niveles de UV comparables a los de Marte. Las mismas fuentes de datos falsos sobre «la
recuperación de la capa de ozono” ni siquiera mencionan el agujero masivo creciente de la
capa de ozono en el hemisferio norte.
Los medios de comunicación (y todas las Fuentes oficiales de datos UV,) han hecho lo
posible para ocultar los peligros de la radiación UV extrema en el hemisferio norte.
El impacto de la exposición a la radiación UV extrema es muy evidente en el lado
expuesto al sol de muchas especies de árboles. Todas las formas de vida expuestas a la
cada vez más intensa radiación UV extrema se ven afectadas, incluyendo las ballenas y
el plancton .
Efectos de la radiación solar UV en las biomoléculas, componentes celulares y
respuestas fisiológicas. (Crédito del gráfico: Royal Society of Chemistry)
Si la capa de ozono colapsa por completo, toda forma de vida expuesta colapsará con
ella (terrestre y acuática). La ingeniería del clima está destruyendo la capa de ozono, y
todos ecosistemas terrestres están en peligro. El informe adjunto sobre los peligros de la
radiación ultravioleta extrema fue elaborado para GeoengineeringWatch.org por un
ingeniero aeroespacial, jubilado de la NASA, que trabaja en exclusiva para nosotros y
cuya identidad no podemos revelar por razones de seguridad.
La actual radiación UVC y el fin de toda forma de vida
en la tierra
Un título amenazador, escogido por esa razón exactamente, para que la gente reaccione.
La negación de este hecho durará hasta el momento en el que desaparezca el
abastecimiento de alimentos y aparezca el hambre, la hambruna, la enfermedad… En
realidad podría decirse que ya está ocurriendo. – Para muchas especies ya es tarde.
Estamos perdiendo un promedio de 200 por día.
El autor estudió en detalle desde 1994 la zona alta del ozono mientras participaba en un
proyecto de investigación atmosférica a gran altitud de la NASA (Ames Dryden Flight
Research Center en Edwards AFB).
Inicialmente la investigación le parecía trivial. ¿Por qué razón gastaría alguien tanto
dinero y ascendería en su carrera solo por anotar las cifras registradas en los sensores
atmosféricos? Esta misma pregunta se la hacían muchos científicos que trabajaban en
ese programa. El consenso entre científicos era que ‘algo malo estaba ocurriendo en la
capa de ozono y que se intentaba conocer las razones’.
Si queremos profundizar en el conocimiento sobre las radiaciones UVC y hacemos una
búsqueda intentando encontrar información creíble de universidades conocidas u otras
“fuentes oficiales”, hay que estar preparado para enfrentarse a la desinformación más
burda, como que “la radiación UVC no alcanza nunca la superficie terrestre”. En este
contexto cuando uno descubre dosis de radiación máxima en la luz solar directa es
difícil asimilarlo. Más aún cuando sabes que alguien ha realizado mediciones
UVA/B/C, ¿qué significan esos datos en la práctica?
En el contexto actual, al común de los mortales le resulta difícil entender la autenticidad
de esta información. ¿Cómo saber que es correcta? Sencillamente es imposible.
El Instituto Nacional de Estándares y Tecnología puede sernos útil en ese entendimiento
porque ha establecido métodos y referencias estándar que ofrecen comparativas y
correlaciones de varios sensores y aparatos de medición, de manera que los datos
obtenidos de esos aparatos aportan la dimensión de verificabilidad y de “trazabilidad”.
Si buscamos datos sobre el ozono en el GSFC de la NASA (Goddard Space Flight
Center) nos damos cuenta de que a pesar de ser un centro de investigación, la
información ha sido “modelada” a medida para el público porque no deja de ser un
centro gubernamental.
Aún así, el GSFC hizo algo bueno, relacionó la radiación UVC con el daño al
ADN/ARN y sugiere que el cambio del 1% en la capa alta del ozono resulta en un
cambio de 2% en la superficie de la tierra”. Si bien debiera decir que: “cualquier
cambio en la capa alta del ozono se multiplica por dos en la superficie de la
tierra”. Los científicos no tienen formación en comunicación así que la forma de
expresar los datos no siempre es la más acertada por lo que es importante tenerlo en
cuenta.
Lo siguiente que debemos hacer en esta investigación es buscar datos que muestren la
peligrosidad de la radiación UVC para la superficie de la tierra, pero esta búsqueda es
infructuosa, así que la única información disponible es la de personas que tienen
aparatos manuales de medición y sin más datos que los que figuran en el aparato. En el
único lugar donde uno puede encontrar los datos UVC de la superficie de la tierra es en
la web http://www.geoengineeringwatch.org/ algo que es de agradecer a este sitio y a
Dane Wigington.
Los gráficos presentados proceden del Radiómetro Espectral ILT950UV, calibrado por
el Instituto nacional de Estándares y Tecnología (NIST). Los datos recogidos por el
ILT950UV y presentados en forma de cuadro no han sido modificados por programa
alguno, solo se ha utilizado Microsoft Excel. Estos datos muestran el promedio de
90.000 puntos en cada uno de los gráficos para ofrecer una comprensión visual de la
peligrosidad de la radiación UV entre 250 y 300 nanómetros. El énfasis del gráfico es
múltiple ya que se ha elegido el amarillo para significar que estamos siendo radiados
con 0,9 a 1,0 uW/cm^2 de energía. El resto de los colores en el espectro del gráfico
ilustra los peligros de exposiciones a radiaciones UV aún más extremas.
Pinchar en la imagen para ampliarla
Niveles de dosificación de radiación máxima en relación con el tiempo. El factor
tiempo para este gráfico es por hora. El nivel de exposición maxima de UVC
recomendado es de @ 270 nm. Este gráfico muestra en Amarillo niveles de
0.8uW/cm^2 a 0.9uW/cm^2 . Recordemos que una exposición a este nivel durante
incluso 1 hora implica que se ha excedido el nivel máximo de exposición recomendado.
Se han establecido niveles máximos de exposición para significar que si se excedían
éstos, ocurrirían daños irreversibles al ADN/ARN y a los tejidos no protegidos como
los ojos y la piel. Los colores adicionales del gráfico revelan mayores peligros de
exposición extrema a los UV.
¿Por qué estos datos son importantes?
Es preciso saber que no se han fijado estándares de exposición a niveles de radiación
solar en el espectro UV. Y no existen por la sencilla razón que las agencias que trabajan
en los niveles de radiación solar “afirman que la radiación UVC nunca alcanza la
superficie de la tierra”. Esta afirmación es notoriamente falsa y peligrosa.
Se han establecido referencias para los niveles de radiación UVC no para la radiación
solar, si no para las fuentes artificiales de UVC en los programas de investigación sobre
enlace de genes ADN/ARN y otras aplicaciones. El nivel máximo de radiación UVC
(específicamente 270 nanómetros) no debe exceder 0.1uW / cm ^ 2 durante 8 horas.
Eso es 1 billonésima de vatio por centímetro cuadrado durante un período de 8 horas.
Esto es importante porque nuestro ADN/ARN tiene una resonancia armónica de 270
nanómetros y la radiación del sol a esta frecuencia destruirá las fibras físicas. Toda
forma de vida ADN/ARN muestra la misma reacción; para los humanos, la sensibilidad
a esta frecuencia es 9.000 veces mayor que la de cualquier otra frecuencia en el espectro
solar. En la actualidad el nivel de UVC es diez veces superior que el nivel máximo.
La función y el diseño del Radiómetro Espectral se escogió con gran cuidado. Este
radiómetro fue probado en el Observatorio de Hamilton en 2016. Los datos recogidos
fueron analizados y son muy preocupantes. Se midieron los niveles de UVC de 1.7uW /
cm ^ 2. Es cuestión de hacer números. Si el nivel máximo de la dosis por hora es
0.8uW / cm ^ 2 / hora (0.1uW / cm ^ 2 veces 8 horas), entonces tenemos que, 1.7uW /
cm ^ 2 * 8 = 13.6uW / cm ^ 2 / hora supone, 17 VECES el nivel máximo de
dosificación.
El autor compartió estos niveles de radiación 270 nanómetros en la superficie de la
tierra con un científico de la NASA que trabaja en el programa “SORCE”. Y éste le
respondió “tus datos son resultado de una luz directa, la radiación UVC es atenuada
completamente en la capa superior de ozono y en la atmósfera”. Dicho científico negó
la existencia de correos electrónicos en los que se recogían estos datos, las llamadas de
teléfono y las comunicaciones vía internet, dando por terminada la relación con el autor.
Nuevamente, la negación por respuesta.
Sin embargo todo es mucho más fácil. Basta con salir a la calle y sentir el sol en la
piel. ¿Se siente más caliente de lo normal? Si. Entonces negarlo significa que la
percepción de la realidad es errónea.
Los científicos siempre quieren cuantificar las cosas – y esto por lo general está bien,
el problema surge cuando se involucran tanto en las mediciones y los datos que
pierden la perspectiva de lo que sucede a su alrededor: la Gran Barrera de Coral está
a punto de desaparecer, la muerte masiva de ballenas, delfines, focas, aves y plantas,
insectos, algas y plancton, las piedras angulares de nuestro suministro de alimentos es
una realidad. Todo está desapareciendo en la actualidad ¿Dónde están los científicos
que tienen que aportar soluciones como la de poner fin en primer lugar a la
geoingenieirá?
Este ingeniero está dedicado a la protección de toda la vida en el planeta tierra. Los
datos gráficos en color seguirán publicándose hasta que nos sea posible. Recordemos
que el amarillo significa alerta y el rojo peligro. Poco importa si se supera el rojo, quiere
decir que nadie quedará aquí para contarlo.
Todo mi reconocimiento para Dane Wigington, y todos los que le apoyan en su trabajo
con GEOENGINEERINGWATCH.org (ex ingeniero aeroespacial de la NASA)
Muchos académicos han preferido mantener sus sueldos y pensiones obviando la
moralidad, la virtud y el honor. Sufren una epidemia de quiebra moral y ceguera
voluntaria al igual que tantos «expertos» en ciencias ambientales y salud humana
«miran hacia otro lado» por así decirlo. Si hubiese sólo unos cuantos más con la
fortaleza y el valor que este ex ingeniero de la NASA, el horizonte tal vez no sería tan
oscuro como se presenta. Deseo expresarle mi más profunda gratitud por sus
continuos esfuerzos. Todos y cada uno de debemos seguir adelante en la lucha por
alcanzar una masa crítica de conciencia pública sobre los crímenes de la ingeniería
del clima. Quizás cuando lo logremos podamos dar a aquellos académicos el
suficiente apoyo para que recuperen su coraje y se unan al esfuerzo para hacer sonar
la alarma. Todos debemos actuar ahora, mañana será muy tarde. DW
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